La  tradicional feria de la ciudad es la fiesta principal en el año, aunque existen  otros eventos que se comparten en toda la república y que no dejan de ser  interesantes oportunidades de asistencia.
		  Feria de Piedras Negras
		  Cada  año, en la segunda semana de agosto se realiza la feria, con exposiciones  ganadera, industrial y artesanal. Durante el evento se pueden apreciar aspectos  culturales importantes de la ciudad como disfrutar su música con los populares  conjuntos llamados “fara-fara”, la típica talabartería y la gastronomía donde  se rinde culto a los famosos “nachos”, invento de un restaurantero oriundo de  Piedras Negras según la tradición oral.
		  Grito de Independencia
		  La  noche del 15 de Septiembre de 1810, de la mano del cura Miguel Hidalgo y  Costilla, con la Virgen  de Guadalupe como estandarte, se dio el grito de independencia incitando al  pueblo al levantamiento armado en contra de la tiranía y abuso excesivo del  gobierno de La Nueva   España, con ello se desató una lucha armada que duraría 11  años y que finalizaría el 28 de septiembre de 1821 con el Plan de Iguala y la  entrada triunfal del Ejército Trigarante a la Ciudad de México. 
		  Este  hecho, que convirtió a México en una nación independiente, se celebra año con  año en la gran mayoría de las ciudades de la República, donde en  medio de una gran fiesta de carácter nacional, los presidentes municipales,  gobernadores y el presidente, gritan a los cuatro vientos las leyendas “¡Viva  México! ¡Viva Hidalgo! ¡Vivan los Héroes que nos dieron patria y libertad!”,  entre otras frases. Después viene el toque de campana que emula lo hecho por  Hidalgo aquella noche de 1810. La noche del 15 de septiembre es conocida como  la noche del grito de independencia, que se ha reducido a “El Grito”, donde se  conjugan la algarabía, comida, una exhibición de fuegos artificiales y mucha  fiesta en una de las mayores celebraciones nacionales del país. 
		  Fiestas del día de Muertos
		  La  celebración del Día de Muertos es una de las más importantes de la nación, ya  que se festeja prácticamente en todo el país. El 2 de noviembre, los panteones  se atestan de gente que lleva a sus familiares fallecidos: comida, bebida  música y compañía, convirtiendo los panteones en verdaderos lugares de fiesta.  En esta fecha, por lo general se realizan concursos de altares, donde se monta  todo un escenario para recordar al difunto, que puede ser algún familiar o  alguien famoso. Se adorna con ofrendas compuestas por los platillos y bebidas  que fueron sus favoritos en vida, así como fotografías y objetos que asocian e  identifican a la persona homenajeada. Otra de las actividades que se realiza  con respecto el día de muertos es el concurso de “calaveras”. Las calaveras son  versos dedicados a un muerto, o persona viva como si hubiera muerto, en los que  generalmente prevalece el sentido del humor, para que los versos rimen y hagan  reír. La mejor de las calaveras es premiada. Otra actividad particular de esta  celebración, es que todas las panaderías del país elaboran el conocido “Pan de  Muerto”, con una receta y forma especial que sólo se hace en este día en  particular. 
		  20 de Noviembre, Día de la Revolución
		  El  20 de Noviembre de 1910 inició la   Revolución Mexicana, fecha histórica para una nación que  buscaba un mejor gobierno, igualdad y justicia. El movimiento fue iniciado por  personajes que quedaron como héroes y visionarios de la historia mexicana,  nombres como Pancho Villa, Emiliano Zapata, entre muchos otros, se forjaron con  pólvora en la historia procurando un buen legado para las generaciones  venideras. Este hecho se conmemora año con año con un desfile donde cuerpos de  seguridad, milicia e instituciones educativas desfilan por las calles  conmemorando a aquellos que lucharon por una buena causa. 
		  Día de la Virgen de Guadalupe 
		  El  12 de diciembre es, sin lugar a dudas, la celebración religiosa más importante  de México. La Virgen  de Guadalupe es considerada como la representación religiosa más mexicana, ya  que la aparición de esta virgen sucedió el 12 de diciembre de 1531 en México en  el Cerro del Tepeyac. Una hermosa virgen morena que se identificó como La Virgen María,  envuelta en un manto azul estrellado con un halo de brillante y celestial luz  se apareció ente el indio Juan Diego, y en Náhuatl le pidió que llevara un  mensaje al obispo: “Que era su voluntad que se construyera ahí un templo para  en él mostrar todo su amor y compasión”. Así, después de cuatro días de hablar  con Juan Diego, la virgen le dio la prueba que necesitaban los frailes para  creer el mensaje que portaba, llenando su manto con rosas, imposibles de  conseguir en aquel lugar y fecha. Juan Diego llevó de nuevo el mensaje a los  frailes, y al extender su manto dejando caer las rosas, estas dibujaron en la  tela la imagen de la   Virgen. Al decir Juan Diego en su lengua nativa lo que veía,  el sonido que emitió (quatlasupe) a sus interlocutores les pareció muy similar  a la pronunciación en castellano de Guadalupe, por lo que los frailes  decidieron llamar así a la   Virgen. Desde entonces, la imagen plasmada en el manto de  Juan Diego, se convirtió en el icono religioso más representativo de México.  Desde entonces también, cada 11 de Diciembre poco antes de las 12 de la noche,  en todos los Santuarios a la   Virgen de Guadalupe del país, se congregan miles de gentes  para llevarle “las Mañanitas” a la Virgen Morena. El festejo se convierte en una de  las fiestas más importantes, con todo tipo de comida, mariachis, cantantes  famosos y mucha devoción.